Toque de queda o prohibir comer en espacios públicos
Ante el aumento del número de contagios, distintas Comunidades Autónomas están volviendo a las restricciones de antes. Llevamos un año y medio de pandemia y las vacunas están consiguiendo que el impacto de esta nueva ola sea significativamente menor, pero algunas de las medidas siguen igual. Unas restricciones que, en casos como el toque de queda, limitan la libertad de circulación y ya provocaron críticas en su día por su idoneidad.
Dos de las comunidades que han vuelto a aplicar medidas más restrictivas son Cataluña y la Comunidad Valenciana, siendo esta última la única comunidad que por el momento ha vuelto a implementar el toque de queda.
Valencia vuelve al toque de queda con el aval de la Justicia
El gobierno de Ximo Puig solicitó al Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana poder aplicar un nuevo toque de queda en Valencia capital y otras 32 localidades de más de 5.000 habitantes. Una petición que ha sido avalada y a partir de la cual la Comunidad Valenciana ha recuperado el toque de queda para los próximos 14 días.
La movilidad nocturna queda así restringida entre las 01.00 y las 06.00 horas, siendo un horario más corto que el aplicado durante el Estado de Alarma. Además del toque de queda, también se han limitado las reuniones sociales a un máximo de 10 personas.
El TSJCV argumenta que las medidas cumplen el «juicio constitucional de proporcionalidad», debido al crecimiento de los contagios, la expansión de la variante delta, el aumento de hospitalizaciones y la «situación cercana al colapso que se está ya produciendo en los centros de Atención Primaria».
Según el criterio del tribunal, la Ley Orgánica 3/1986, de Medidas Especiales en Materia de Salud Pública, ampara la aplicación de esta medida, aunque sería «deseable» tener una legislación específica. La Sala recuerda que el Supremo ha amparado en el pasado la limitación de derechos fundamentales, «siempre que su justificación esté a la altura de la intensidad y extensión de la restricción de derechos fundamentales de que se trate». Una «intensidad» que se cumpliría en la situación actual, según el criterio de los jueces que avala lo expuesto en el informe de la Generalitat.
El «ocio nocturno no reglado» y las «relaciones sociales» son las principales causas de contagios en estos momentos y frente a ello, la «limitación a la circulación nocturna presenta una eficacia mucho mayor que otras medidas existentes para intentar impedir la actividad de ocio nocturno conocida como botellón», argumenta el TSJCV.
Cataluña añade medidas para exteriores
Con una incidencia acumulada de 725 puntos, Cataluña presenta los peores datos de España; con 231 pacientes en UCI, muy por encima de las dos comunidades siguientes que son Andalucía con 122 y Madrid con 113. Pese a la elevada incidencia, estos números todavía siguen lejos de los de la tercera ola, donde a finales de enero en Cataluña tenían una incidencia de 573 puntos pero 803 pacientes en UCI.
Para frenar la oleada de contagios, desde la Generalitat de Cataluña han impuesto nuevas restricciones hasta el 23 de julio, entre ellas la limitación de reuniones a 10 personas. El horario máximo de cierre nocturno se ha reducido hasta las 00.30 horas.
Por otro lado, se ha recuperado la prohibición del consumo de alimentos y bebidas en el espacio público, salvo en espacio habilitados con mobiliario para ello como áreas de descanso o picnics. Llama la atención que se siguen aplicando medidas centradas en exteriores como la prohibición de comer en espacios públicos cuando es en los recintos cerrados donde la probabilidad de contagio es mayor.
El gobierno autonómico ha solicitado a los ayuntamientos que cierren playas, parques y plazas por la noche, una medida que ha sido criticada desde ayuntamientos como el de Barcelona por derivar responsabilidades. Unos espacios que son utilizados en casos concretos para el «botellón», pero en muchas otras ocasiones son suficiente espaciosos como para no suponer riesgos.
El consejero de Salud Josep Maria Argimon ha explicado que la Generalitat no es partidaria del toque de queda «si no es estrictamente necesario». Sin embargo, la portavoz Patrícia Plaja ha explicado en rueda de prensa que se ha solicitado un informe sobre la aplicación del toque de queda, equivalente al del gobierno valenciano.
Qué efectividad tienen este tipo de restricciones
En su rueda de prensa semanal, el doctor Fernando Simón ha pedido que se deje de hablar de «restricciones»: “no tienen por objetivo restringir nada. El objetivo es controlar la transmisión de la enfermedad».
Evitar el contagio entre los jóvenes parece ahora la principal preocupación de las autoridades sanitarias y es hacia ese colectivo donde están enfocadas las medidas. Sobre el toque de queda, Pedro Gullón, de la Sociedad Española de Epidemiología, argumentaba que «se llegó a prohibir incluso salir a pasear, algo que hizo mucho daño psicológico a la gente y que la evidencia ha demostrado totalmente innecesario».
Javier Segura, de la Asociación Madrileña de Salud Pública, explicaba que «esas personas se van a contagiar igual si se toman la cerveza a las 18:00 o se la toman a las 20:00», apuntando de nuevo al contagio en interiores como principal fuente de preocupación.
Por otro lado, se ha recuperado la prohibición del consumo de alimentos y bebidas en el espacio público, salvo en espacio habilitados con mobiliario para ello como áreas de descanso o picnics. Llama la atención que se siguen aplicando medidas centradas en exteriores como la prohibición de comer en espacios públicos cuando es en los recintos cerrados donde la probabilidad de contagio es mayor.
El gobierno autonómico ha solicitado a los ayuntamientos que cierren playas, parques y plazas por la noche, una medida que ha sido criticada desde ayuntamientos como el de Barcelona por derivar responsabilidades. Unos espacios que son utilizados en casos concretos para el «botellón», pero en muchas otras ocasiones son suficiente espaciosos como para no suponer riesgos.
El consejero de Salud Josep Maria Argimon ha explicado que la Generalitat no es partidaria del toque de queda «si no es estrictamente necesario». Sin embargo, la portavoz Patrícia Plaja ha explicado en rueda de prensa que se ha solicitado un informe sobre la aplicación del toque de queda, equivalente al del gobierno valenciano.
Qué efectividad tienen este tipo de restricciones
En su rueda de prensa semanal, el doctor Fernando Simón ha pedido que se deje de hablar de «restricciones»: “no tienen por objetivo restringir nada. El objetivo es controlar la transmisión de la enfermedad».
Evitar el contagio entre los jóvenes parece ahora la principal preocupación de las autoridades sanitarias y es hacia ese colectivo donde están enfocadas las medidas. Sobre el toque de queda, Pedro Gullón, de la Sociedad Española de Epidemiología, argumentaba que «se llegó a prohibir incluso salir a pasear, algo que hizo mucho daño psicológico a la gente y que la evidencia ha demostrado totalmente innecesario».
Javier Segura, de la Asociación Madrileña de Salud Pública, explicaba que «esas personas se van a contagiar igual si se toman la cerveza a las 18:00 o se la toman a las 20:00», apuntando de nuevo al contagio en interiores como principal fuente de preocupación.
FUENTE
XATAKA