LAS CALLES DE MADRID: DON FRANCISCO DE QUEVEDO Y VILLEGAS (1580-1645)
DON FRANCISCO DE QUEVEDO Y VILLEGAS
Inútil sería intentar aquí, obligadamente breve, un apunte siquiera de la rica y tan conocida biografía de este gran escritor de nuestro Siglo de Oro. Ni aun sus obras podemos por falta de espacio, relacionar. Será preciso reducir a unos trazos esenciales el recuerdo del gran escritor y poeta.
De familia oriunda de la montaña, nació Quevedo en Madrid, el año 1580, y fue bautizado, el 26 de septiembre, en la parroquia de San Ginés. Estudió y se graduó en Teología en la Universidad de Alcalá. Conoció bien el latín, griego y hebreo y aun algo de italiano, árabe y francés.
Se inicia su vida pública en Italia, con el virrey de Nápoles, duque de Osuna, después de un incidente madrileño en la parroquia de San Martin, en que dio muerte a un hombre, que en la iglesia había abofeteado a una dama, y en el que acredita su fama de hábil en el manejo de la espada.
Regresa a Madrid en 1617 y es cuando se le concede el Hábito de Caballero de la Orden de Santiago. Conoce las prisiones en 1620, por vez primera, cuando con ocasión de una causa que se le formó al de Osuna, fue llevado preso a su villa de la Torre de Juan Abad, donde estuvo más de tres años, hasta lograr la absolución. Casó, en 1634, con doña Esperanza de Aragón, señora de Zetina, pero fue corto el matrimonio, roto por la muerte de la esposa.
Envuelto en las intrigas políticas del de Osuna y enemigo del conde-duque, fue detenido el 7 de diciembre de 1639 en la casa del duque de Medinaceli, donde vivía, y llevado con todo rigor al convento de San Marcos de León, donde había de permanecer más de cuatro años, hasta después de la caída del de Olivares, pero la dureza de la prisión habíale ya agotado y después de una breve estancia en Madrid, quizá en su casa de la calle del Niño, volvió a su Torre de Juan Abad, enfermo ya del mal que acabaría con sus días, el 8 de diciembre de 1645.
Escritor de larga producción, citaremos de ella Política de Dios y gobierno de Cristo, Historia y vida del Buscón llamado Pablos y Los sueños.
Vive don Francisco de Quevedo en el momento en que florecen los más grandes escritores castellanos y, sin embargo, su obra se iguala con la de los mayores escritores y poetas. Tiene además una intensa vida política, dentro y fuera de España, interviniendo activamente en asuntos de gobierno en Italia. Su figura de caballero y de poeta es como un símbolo del tiempo en que le correspondió vivir.
El retrato es de este madrileño de excepción es obra de Velázquez y propiedad del Instituto de Valencia de Don Juan.
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