Estamos obligados a llevar una baliza V16 en el coche a pesar de los riesgos
Que puedan rastrear nuestra casa no es uno de ellos
No queda demasiado para que debamos llevar en el coche la dichosa baliza V16 conectada. Poco importa que no estemos de acuerdo con ella, al menos mientras no queramos recibir una multa. Y hay muchas teorías locas en torno a estos dispositivos; como un bulo que está circulando actualmente sobre la facilidad para espiarnos.
Sabe una baliza V16 dónde está nuestra casa? Respuesta corta: no. La explicación queda totalmente clara en la respuesta larga: dado que la baliza no tiene energía para funcionar, es imposible que pueda registrar nuestra casa al aparcar el coche. Sí, hay balizas que incorporan una batería, pero no son las que va a tener la mayor parte del mundo.
Imagen capturada de X
El bulo se está extendiendo junto con la placa base de una baliza V16. Hay quienes defienden que, con solo entrar en el código del dispositivo, cualquier ladrón podría identificar nuestro domicilio para, después, robar en él. Se califica al dispositivo como «baliza de rastreo», algo que es falso.
Es imposible que nos rastreen con solo llevar la baliza. Como decíamos, una baliza V16 conectada no funciona sin energía. Por tanto, solo puede enviar la localización si le ponemos las pilas (las que tienen batería incorporada, menos habituales, necesitan un encendido). Esto es necesario cuando tenemos una incidencia con el coche en carretera, no en nuestra casa.
Un simple razonamiento básico desmonta las teorías conspirativas de la mayoría de bulos en torno a las balizas V16 conectadas. Porque:
Ni la DGT ni la policía pueden rastrear la posición de las balizas V16. Es técnicamente imposible.
El hardware está pensado para comunicar la posición a la plataforma DGT 3.0 solo cuando están puestas las pilas. No funciona de ninguna otra manera.
La información que se envía a la plataforma es anónima: solo aparecen los datos de posición y de tiempo, nada más. Esto está contrastado por la Agencia Española de Protección de Datos.
Dado que una baliza requiere una activación manual en caso de incidencia, es imposible que registre la posición de nuestra casa. Si ya está aparcado, ¿para qué vamos a usar un dispositivo luminoso de advertencia? Resulta absurdo.
La baliza es una herramienta de señalización, no de rastreo: no guarda ningún registro de posiciones en el hardware.
El dispositivo no está asociado a datos personales: toda la información generada ni se asocia a la matrícula ni al DNI del conductor.
La baliza V16 conectada es un trozo de plástico que no hace nada más que permanecer dormido mientras no tenga energía. Ese va a ser su estado la mayor parte del tiempo (con suerte)
Con un simple análisis de su funcionamiento pueden descartarse todos los bulos que están circulando en torno a su uso. Incluido el de la conexión para acceder al firmware: los pines que aparecen en la placa de una baliza son los habituales puertos de depuración (SWDIO/SWCLK) que están presentes en la mayoría de circuitos integrados.
La cuestión no es si nos espían. Aunque alguien lograra conectarse a esos puertos y el fabricante no hubiera bloqueado el acceso al firmware, el esfuerzo sería inútil: de existir un registro de localizaciones en la memoria de la baliza, este estaría vacío. Lo extraño sería que la hubiéramos encendido en el aparcamiento de casa
La polémica por la imposición de la baliza no va a cesar hasta que todos tengamos la nuestra. Y el problema no es si pueden espiarnos con ella o no (es lo segundo), sino el hecho de tener que adquirir un hardware que puede ser menos seguro que los triángulos que tuvimos que comprar hace años. De hecho, se está convirtiendo en un importante negocio.
Imagen de portada | Iván Linares editada con Gemini
FUENTE
XATAKA






